Donante Héroe

Cuando Julio no despertó después de ser calentado, mi mente me decía que estaba con muerte cerebral, pero mi corazón no quería creerlo. Tras varias pruebas y una repetición de la tomografía de su cerebro, el neurólogo determinó que no había nada allí para sostener ningún tipo de vida normal. Conociendo a Julito como todos lo hacíamos, sabíamos que él no hubiera querido vivir en un estado vegetativo: eso no era lo que él era. Amaba la música, bailar, viajar y estar en la playa.

El equipo de Life Alliance estuvo con mi familia y conmigo durante todo el proceso de DCD (Donación Después de la Determinación de la Muerte). Todos encontramos consuelo en saber que Julio salvó dos vidas con el regalo de sus riñones. Además, su donación de ojos, hueso y tejido mejoró las vidas de más de cien personas. No pasa un día en que no extrañe a mi hijo, especialmente al ver a su hija crecer sin él, hubiera sido un padre divertido, pero pienso en su vida y recuerdo los recuerdos que nos brindó, las vidas que tocó con su donación de órganos y tejidos y no su muerte trágica. Solía decir siempre, "La vida es demasiado corta, así que vive cada día como si estuvieras de vacaciones y nunca dejes de bailar", así que por favor hazlo en su memoria.                                                                            

- Angela Buenano, Madre Donante